20 Naturalización de la economía normativa


Casi se da por sentado entre los economistas que el objetivo final de las políticas públicas es proporcionar a la sociedad más “bienestar,” y el concepto de bienestar, así como la estrategia general para mejorarlo, es más o menos objeto de estudios de economía normativa.

La naturalización de la economía normativa es un intento de analizar el “objetivo último de la política pública” desde la perspectiva de la evolución cultural humana. El “objetivo final” es una de las “variantes culturales” que pueden estar sujetas al análisis darwiniano y pueden ser adaptables o no en determinadas circunstancias. El problema más importante que se plantea aquí es si dicho análisis podría ser útil para establecer ese “objetivo final” y así contribuir a la economía normativa y resolver el “problema normativo” (como se reformula en la filosofía del derecho).

Se destacan tres cuestiones fundamentales que parecen constituir los fuertes límites de la naturalización del problema normativo:

  1. La ontología naturalista no supera la “falacia naturalista” indicada por Hume y Moore.

  2. Las perspectivas epistemológicas en los relatos naturalistas son confusas. Se pueden formular diferentes postulados normativos desde la perspectiva individual y desde la perspectiva del grupo respectivo, mientras que el análisis darwiniano parece privilegiar a la población.

  3. El algoritmo genético con función de aptitud endógena parece no ser susceptible al “primer plano matemático.” Incluso si conocemos el orden normativo inicial, existen límites para encontrar un atajo para predecir el valor futuro de la función de aptitud. En otras palabras, la previsibilidad del futuro orden social está fundamentalmente restringida.